Cuerpo Alma y Corazón

Que cada día reine en sus corazones el amor y la presencia de Jesús.

Dios los bendiga y el Angel del Señor los acompañe siempre...

sábado, 24 de julio de 2010

Confia y deja que Dios te Dirija



Confia y deja que Dios te Dirija

¿Está usted inseguro (a) con lo que el futuro tiene? ¿Usted encuentra difícil confiar en lo desconocido y lo invisible? Usted no esta solo (a); esto es algo que cada uno de nosotros tenemos que vencer de una manera u otra. Aunque pueda parecer difícil confiar en Dios, usted puede entregarle a Él cada aspecto de su vida. Cuando usted entrega el control de su vida a su Padre celestial, Él le dirigirá hacia la vida abundante.

Vivimos en un mundo lleno de hechos y figuraciones. Nuestro calendario diario esta lleno de metas para lograr. Constantemente estamos enfrentados con decisiones que afectan nuestras vidas de una manera positiva o negativa. Muchas veces hacemos cosas en cual no sabemos cual será el resultado final, pero creyendo que todo saldrá bien. En otras ocasiones, a causa del temor, evitamos ir hacia adelante.

Hay una manera segura de vivir su vida y tomar decisiones que siempre le llevará hacia la dirección correcta-al desarrollar confianza en Dios y Su Palabra. Sin la confianza, simplemente no tendrá la habilidad de confiar en Él. Al igual que en cualquier otra relación, su confianza en Dios viene cuando usted diariamente está en comunión con Él. Al estar en comunión con el Padre por medio de la oración y el leer Su Palabra, su confianza en Él se desarrollará.

Pasando tiempo con Dios diariamente tomará una decisión de calidad de su parte y la voluntad y apartar el tiempo necesario para Él solo. Esto tiene que ser una prioridad. Al usted leer mas de Su Palabra, mas podrá distinguir Su voz cuando Él le está hablando usted. Además, Su Palabra revelara Su carácter, cual es amor (1 Juan 4:16). Cuando usted sabe que Dios le ama, será establecido firmemente en la verdad de que Él le ama y como dirigirá su vida.

Si usted encuentra difícil confiar en el Señor, y está concernido (a) de cómo será su futuro, busque en las Escrituras para dirección. Proverbios 3:5-7 declara, “Fíjate de Jehová de todo tu corazón; y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, y el enderezará tus veredas. No seas sabio en tu propia opinión; teme a Jehová, y apártate del mal.” La Palabra nos instruye de reconocer a Dios en todo nuestros caminos. Esto significa consultar con Él antes de tomar decisiones.

Sea un negocio o decisión de comprar un hogar, trasladarse a otra ciudad, o seguir una meta, confiando en Dios significa de ir primero a Él. Cuando usted busca a Dios de esta manera, se posesiona para obtener necesario sabiduría para tomar sus propias decisiones. Además, usted demuestra que confía en Él a pesar de lo que sea. Depende en Dios para guiarle y no fallará

Estoy seguro que usted tiene esperanzas y deseos que quisiera que se convirtieran en realidad. Mientras que usted está tratando de buscar sus aspiraciones, quizás no sabe que dirección o camino tomar. Por lo tanto, no tiene que ser consumado con preocupaciones acerca de si sus sueños se manifestarán. La Biblia declara, “El corazón del hombre traza su rumbo, pero sus pasos los dirige el Señor” (Proverbios 16:9, NVI). Dios sabe su corazón. El sabe acerca de los deseos que ha puesto en su corazón y Él los cumplirá al usted reconocerle a Él.

Usted quizás se dirá como pagará sus cuentas o si usted podrá encontrar un trabajo nuevo. Cualquiera que sea las circunstancias, no se desanime. La pesadumbre y el desaliento pueden hacer que sus emociones vayan en oposición de la Palabra de Dios. En vez de estar agobiado con su situación, busque la dirección e instrucción del Señor. Confié en Él para que le enseñe lo que tiene que hacer para permanecer confiado de que Él podrá perfeccionar lo que le concierne a usted.

Aprendiendo a confiar en Dios so sucede de la noche a la mañana; es un proceso. Tome tiempo para reflexionar en las situaciones en cual Dios le ha sacado. Piense acerca de cómo Él dirigió sus pasos en medio de las circunstancias. Cuando usted reconoce que Dios está concernido acerca de cada detalle en su vida, usted hallará que es fácil depender de Él.

Su Padre celestial sabe como llevarle a su destino. “Porque este Dios es Dios nuestro eternamente; Él nos guiara aun más allá de la muerte” (Salmos 48:14). Enfóquese en esta escritura si usted tiene dificultad confiando en el Señor.
Medite en la verdad de que Dios es su ayuda y guía en necesidad. Aunque usted no sea especifico (a), puede tener confianza cada momento, simplemente porque confía en que Dios le guiara.

Él hará más para usted de lo que se imagina.
Dios los bendiga cada día más...

Fortalece Tu Voluntad Y Se Valiente



Fortalece Tu Voluntad Y Se Valiente

Dios nos ha dotado de un cuerpo, alma, corazón y espíritu. El alma está compuesta por la mente, las emociones y la voluntad. La mente se alimenta de las ideas, el conocimiento para desarrollar la inteligencia. Las emociones pueden ser positivas o negativas, desde una simple sorpresa hasta la ira, de felicidad o de odio, miedo o valentía. En tanto que la voluntad juega un papel sumamente importante, su participación determinará nuestro éxito o nuestro fracaso en la vida.

Fortalecer la voluntad requiere de determinación, perseverancia, no darse por vencido. Exigirse a si mismo aquello que se ha propuesto realizar. El levantarse a cierta hora por la mañana, o cumplir una meta, realizar una carrera profesional, leer un libro completo. Seguir rigurosamente un régimen alimenticio. Retirarse de determinadas compañías que no edifican. Proponerse a incorporar nuevo vocabulario a su léxico. Cambiar de hábitos. Realizar ejercicio. Etc.

Cuando la mente, las emociones y la voluntad trabajan juntas, forman un equipo poderoso. Ya que la mente sugiere, la emoción anima y la voluntad empuja. Si la mente sugiere estudiar con ahínco, la emoción acelera la adrenalina, en tanto que la voluntad se encarga de impulsar los motores. Caso contrario; la mente sugiere estudiar, la emoción dice ¡!si!! pero la voluntad contesta “mañana”. La voluntad no fortalecida puede ser lo suficientemente persuasiva para retirarte de tu propósito.

No en balde la Palabra de Dios nos demanda fortalecer la voluntad, porque será la que nos ayude a vencer en los momentos de debilidad.

“No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy”, nos da claro ejemplo de la urgente necesidad de perseverar en el ejercicio del músculo de la voluntad.
Una vez desarrollado se verá fortalecido, lo cual producirá sintomáticamente valentía al saberse “equipado”.

Eclesiastes. 2.2. Fortalece tu voluntad y sé valiente, para no acobardarte cuando llegue la calamidad.
Psic. Patricia Villanueva
“VIDA DE ÉXITO EN SU PALABRA”