Cuerpo Alma y Corazón

Que cada día reine en sus corazones el amor y la presencia de Jesús.

Dios los bendiga y el Angel del Señor los acompañe siempre...

martes, 7 de octubre de 2008

Observa la Creación de Dios y siente su gran Amor.



La Creación es el amor de Dios
manifestado ante ti!.

¿Dios te ama? Eso es algo que puedes ver y sentir en el hermoso mundo que Él te ha dado.
¡Con sólo mirar a tu alrededor y ver la belleza de la Creación puedes sentir el amor de Dios! ¡Observa el mundo y sabrás que Dios te ama! ¡Su amor se hace evidente en todo lo que ha hecho para tu deleite! (Rom.1:20)

¡Considera la paciencia y misericordia de Dios! ¡A cada hombre que ha existido, a todo hombre que ha vivido, le ha enviado Su luz en algún momento de su vida para iluminar con el amor de Dios su corazón en tinieblas, como demostración de Su amor! (Jn.1:9)

No sólo derrama tanta belleza y bendición sobre los justos, sino también sobre los injustos, quienes en realidad no merecen Su amor ni Su misericordia. Pero aun así Él hace salir el sol sobre ellos casi todos los días y les envía la lluvia para hacer crecer las flores, los hermosos árboles y la hierba.
Les ha dado el cielo, las nubes, el sol, la luna, las estrellas... ¡la maravillosa Creación de Dios! (Mat.5:45)
¡Si no crees que Dios te ama, mira a tu alrededor y observa Sus bendiciones! Esta preciosa vida, este maravilloso mundo en que vivimos, ¡y la magnífica y espléndida Creación que hay a tu alrededor! ¿Qué más podría decirte? Él no tenía por qué hacer al mundo tan hermoso. ¡Lo hizo así sólo por ti!

De Jesús con cariño

No puedes cerrar los ojos, taparte los oídos y dejar de percibir todo lo que hay en el mundo, ya que el mundo te rodea y estás en él. Pero si no quieres ser de este mundo, debes depurarte con el antídoto de Mi Palabra. Así serás puro con la Palabra que te he hablado.
Oye Mis Palabras, escúchalas y créelas, pues Satanás ha pedido permiso para derrotarte. No mediante un gran diluvio, sino debilitándote un poco por aquí y otro poco por allá; minando los cimientos por aquí y por allá; sembrando una incredulidad por acá, una duda más allá, y por medio de algunas de tus propias conclusiones erróneas.
Mis Palabras son aguas que dan vida. Purifican tu espíritu. Nutren tu alma. Fortalecen tu pensamiento y tu corazón, y te acercan a Mí.


Dios los bendiga cada día mas...